Qué importante puede ser un suministro autónomo se ve en estos días.
Como aparte de mis ingresos por alquiler recibiré una pensión más bien modesta, por supuesto he orientado todo a ser financieramente independiente en algunos años. No puedo confiar en los ingresos por alquiler ni en una vida despreocupada en la vejez. Tampoco en la pensión. Quizás tenga que pagar en 5 años 10.000 euros de impuesto predial por mi casa, como en los Estados Unidos.
O habrá una compensación de cargas con hipoteca forzosa estatal sobre las propiedades. Ya nadie puede descartarlo.
Por eso prefiero permanecer independiente. Si no hay que consumir electricidad, no hay costos de calefacción y además se tiene agua gratis, ya se ha ganado mucho. Y esperemos a ver cómo se desarrollan los precios de los alimentos.
Con un precio de 50 € por kilo de carne de cerdo, 10 euros por un pan y 20 euros por un paquete de huevos, esto también será inasequible para la clase media. ¿O alguien aquí cree que los salarios se ajustarán a la inflación? Eso no pasará.
Como en el futuro queremos prescindir voluntariamente del carbón ruso, estos escenarios podrían llegar más rápido de lo esperado. En su locura sancionadora, la UE arruina el polo económico de Alemania. Las reservas duran aún 4 semanas. Hasta entonces ya se racionará.
No sé qué tan tonto se puede ser. Pero bueno, quien no quiere ya tiene.
Alemania solo cuenta con reservas muy pequeñas de carbón
En el año 2020, Alemania consumió aproximadamente 31 millones de toneladas de carbón duro. La mitad de esta cantidad se usó para la generación de energía, la otra mitad corresponde a la industria, por ejemplo en la producción de acero. Para cubrir la demanda total, Alemania importa alrededor de 14,5 toneladas de carbón duro de Rusia, es decir, aproximadamente el 50 por ciento del consumo total anual, según el informe del Ministerio de Economía que posee Business Insider. En el sector de la generación eléctrica, la proporción de carbón ruso es aún mayor.