Digamos que yo también preferiría claramente que hubiera un partido conservador fresco y nuevo sin Höcke y sus secuaces. Pero la CDU también ha virado hacia la izquierda y tiene gente totalmente inaceptable como Hendrik Wüst o Röttgen.
No sé qué es lo que siempre esperáis de los partidos conservadores. Hemos visto durante 16 años cómo muchas evoluciones se han ignorado o destruido deliberadamente por partidos conservadores.
Lo que deseo es un partido moderno, que aborde los problemas del presente y del futuro y que no arrastre tras de sí a toda una tropa de hombres mayores que, debido a su formación y su historia personal, no perciben estos problemas como tales y, aun así, no tienen ninguna solución que ofrecer.
Veo, entre otros, los siguientes problemas:
- Precios de la energía
- Cambio climático
- Escasez de personal cualificado
- Escasez de viviendas
- Infraestructura de transporte defectuosa
- Expansión catastrófica de la infraestructura de comunicaciones
- Problemas para conciliar trabajo y familia
- Falta de digitalización
- Sistema tributario opaco
¿Con cuál de estos temas quieres arreglar con partidos conservadores y métodos conservadores? Son casi todos temas que no forman parte de la realidad vital de estas personas y por eso no se tratan.
No, no. Hace falta un equipo joven y dinámico, que no esté atascado en el lodazal de los lobbies y los partidos, y que no ande haciendo parches con frases, métodos y trucos anticuados, como el descuento en la gasolina. Solo hay que echar un vistazo al concepto de reducción de CO2 del ministro de transporte. Quien hasta ahora pensaba que Andi Scheuer era un cero a la izquierda, se sorprenderá.
Hubertus Heil quería volver a imponer la obligación del teletrabajo a partir de octubre para aliviar la situación pandémica. Efecto secundario agradable: muchos empleados se habrían visto aliviados de inmediato porque se ahorraban gasolina. Bonitos efectos secundarios: se habría ahorrado CO2 y en general energía, que ahora está tan escasa que se supone que tenemos que lavarnos con un paño.
¿Y cómo deciden los partidos mayoritariamente conservadores? Zas: rechazado, porque aunque realmente habría servido para algo, tienen miedo de los quejicas que no pueden hacer teletrabajo y por eso se quejan. No importa cuánto energía se ahorre, el miedo a salirse de los patrones habituales ha ganado.
Y por eso no hace falta un partido conservador nuevo o adicional, sino uno moderno, que viva en el aquí y ahora y que ofrezca soluciones modernas para problemas modernos.