No está oscuro detrás, sí, pero no entran rayos de luz que realmente puedan alcanzar el interior. El vidrio satinado solo produce luz difusa dispersa, que no llega muy lejos dentro del espacio.
Yo siempre usaría vidrio transparente y solo en caso necesario lo mandaría foliar profesionalmente. La excepción podría ser si en el exterior hay una zona realmente visible públicamente. Pero en ese sentido yo reduciría el uso de vidrio en general. Un edificio bien orientado tiene al norte, quizá al este, por lo que la luz de todas formas viene desde otro lado.