WilderSueden
23.03.2023 16:37:07
- #1
La cuestión decisiva es de dónde provienen las ideas revolucionarias. En 1900 no existía ningún plan para prohibir las locomotoras de vapor a partir de 1920 ni tampoco había una estrategia de la UE de 2005 para ordenadores de bolsillo. Los burócratas solo pueden imaginar una versión mejor de lo que ya conocen. No hay ideas revolucionarias allí y si alguna vez hubiera alguna, se perdería en la vía administrativa. Pero aquí el Estado cree que conoce la mejor idea para el futuro y que ya puede dictar cómo deben resolverse los problemas futuros. Y cuando se observan los resultados 20 años después, se constata que en el mejor de los casos fue un camino bastante costoso hacia la meta (por ejemplo, [Einspeisevergütung/Erneuerbare-Energien-Gesetz-Umlage]). Y en el peor de los casos se reconoce que fue un error total (por ejemplo, todos cerramos las brechas eléctricas con gas).