Lamentablemente, el resto no está yendo tan bien. A pesar del estudio geológico, tenemos algo de mala suerte con el suelo de construcción. Tenemos una lente de arcilla en el terreno y por eso todo el agua freática fluye a través de ella. Por lo tanto, tenemos que excavar una parte nuevamente, fundar de otra manera y colocar un drenaje. También hay problemas con la pendiente de la excavación. Actualmente estamos en conversaciones con el vecino para ver si podemos excavar 2,5 metros de su terreno (temporalmente). Su muro, que construyó el año pasado por cuenta propia, también desaparecería con esto... Pero no dejamos que esto nos quite la ilusión por la casa.