Creo que es una combinación de varias cosas.
- artesanos locales (cuando es posible), algunos conocidos personalmente
- algunos artesanos trabajan regularmente con mi arquitecto (amigo)
- pago adecuado (¿se puede decir eso con estos precios)? No regatear hasta el último centavo sino "dejar vivir".
- estar diariamente en la obra, contacto personal, incluso invitar a un cigarrillo...
- muchos artesanos se conocen de otros proyectos
- valoración e interés en su trabajo. No solo al estilo suabo (net gschimpft isch gnug gelobt), sino elogiar de verdad cuando ha quedado bien.
- Sin buscar problemas legales
- me gusta que me expliquen cosas
Por suerte, era/soy tan flexible con el tiempo que he planificado muchísimo. Aunque en realidad alguien fue pagado para ello. Así puedo opinar en muchas cosas y hacer las preguntas correctas.
Conozco el trabajo de la mayoría de los oficios. Estos están igualmente bien hechos. Pero tal vez este proyecto les divierte y ponen un poquito más.
Con los suizos también hubo química inmediata. Simplemente fue la sensación correcta y la calidad fue impecable.
Algunos oficios normalmente no trabajan en casas unifamiliares. Pero seguro que también ejecutarían proyectos más pequeños de esta manera.
Tengo un caso en la familia con un contratista general. Eso fue más bien un desastre total. Todo salió mal. Al final el contratista general se fue a la bancarrota...
Para nosotros siempre quedó claro que íbamos a construir mediante contrataciones individuales. En un proyecto así no se puede hacer de otra manera.
Como yo también hago algunas cosas y me ensucio, probablemente soy un poco más simpático que si estuviera en la obra con traje y corbata.
Una vez estuve en la estructura en bruto donde los trabajadores estaban fumando un cigarro al lado. Fue inmediatamente una buena forma de empezar a conversar. No tuvieron problemas cuando unos días después fumé un puro con un amigo en el tejado del garaje...
En general es una relación muy relajada. Los trabajadores saben que siempre pueden hablar conmigo. No le arranco la cabeza a nadie si algo sale mal, sino que pensamos cómo resolver el problema.
Mi escalera también es muy popular entre los trabajadores. Mientras la vuelvan a colocar, no tengo problema con eso.
En nuestra obra se puede comunicar en alemán (ok, algunos no contarían suizos para esto).