Tolentino
03.02.2021 12:44:30
- #1
Bueno, ya he regresado de la cita. El ambiente fue bastante relajado. Se notaba claramente el esfuerzo por satisfacerme.
Finalmente se confirmó que se podría haber hecho de otra manera, pero para eso habría hecho falta un plan detallado de obra, para que el albañil supiera exactamente dónde y cómo colocar cada piedra, de modo que encajara en cada hilera. Pero ahora ya es demasiado tarde. No quieren corregir a partir de la segunda hilera cortando las piedras, porque entonces habría que seguir cortando hasta arriba. Entonces, lo entiendo como que quieren ahorrarse trabajo y, en aras de un progreso rápido de la construcción (que también me interesa), si de ahora en adelante se hace bien y la hilera queda segura a largo plazo, prefieren proceder así.
Esto me lo confirmó también mi perito.
Voy a recibir un documento del estructurista y otro del jefe de obra del contratista general que confirme la estabilidad y que no habrá grietas. Eso me basta.
Ah, y como motivo para no demoler, que según el jefe de obra sería aún relativamente posible con dos hileras, dijo que entonces también tendría que hacerlo en la casa del vecino de atrás, porque implicaría admitir que no es seguro, pero que allí la demolición ya no sería proporcional ni quiere hacerla bajo ningún concepto.
La casa del vecino también fue aprobada por el fabricante de la piedra, eso es necesario con Dryfix. Y el fabricante ya conoce el caso. Mi perito llamó allí y ya sabían el nombre del albañil porque él ya había llamado antes. Cuántos líos genera todo esto...
Por cierto, el perito elogió la ejecución del muro más arriba en la casa del vecino.
Bueno, como ya se ha contado en otro lugar que los propietarios rebeldes no motivan precisamente a los artesanos que trabajan y no quiero aditivos vomitivos en mi mortero ni en ningún otro lado, fui comprensivo, agradecí educadamente el tiempo y ofrecí café y pastas.
Quiero decir, si eso significara que tendría mi casa un mes antes, haría de peón de obra un día entero vestido solo con un mono de lana y polainas de cuero.
Sin embargo, sé que a partir de ahora aumentaré aún más mi frecuencia de visitas y mi cultura de mediciones posteriores.
Hay que aprovechar que solo vivo a 5 km y que con el coronavirus el tráfico ya no es tan malo.
Finalmente se confirmó que se podría haber hecho de otra manera, pero para eso habría hecho falta un plan detallado de obra, para que el albañil supiera exactamente dónde y cómo colocar cada piedra, de modo que encajara en cada hilera. Pero ahora ya es demasiado tarde. No quieren corregir a partir de la segunda hilera cortando las piedras, porque entonces habría que seguir cortando hasta arriba. Entonces, lo entiendo como que quieren ahorrarse trabajo y, en aras de un progreso rápido de la construcción (que también me interesa), si de ahora en adelante se hace bien y la hilera queda segura a largo plazo, prefieren proceder así.
Esto me lo confirmó también mi perito.
Voy a recibir un documento del estructurista y otro del jefe de obra del contratista general que confirme la estabilidad y que no habrá grietas. Eso me basta.
Ah, y como motivo para no demoler, que según el jefe de obra sería aún relativamente posible con dos hileras, dijo que entonces también tendría que hacerlo en la casa del vecino de atrás, porque implicaría admitir que no es seguro, pero que allí la demolición ya no sería proporcional ni quiere hacerla bajo ningún concepto.
La casa del vecino también fue aprobada por el fabricante de la piedra, eso es necesario con Dryfix. Y el fabricante ya conoce el caso. Mi perito llamó allí y ya sabían el nombre del albañil porque él ya había llamado antes. Cuántos líos genera todo esto...
Por cierto, el perito elogió la ejecución del muro más arriba en la casa del vecino.
Bueno, como ya se ha contado en otro lugar que los propietarios rebeldes no motivan precisamente a los artesanos que trabajan y no quiero aditivos vomitivos en mi mortero ni en ningún otro lado, fui comprensivo, agradecí educadamente el tiempo y ofrecí café y pastas.
Quiero decir, si eso significara que tendría mi casa un mes antes, haría de peón de obra un día entero vestido solo con un mono de lana y polainas de cuero.
Sin embargo, sé que a partir de ahora aumentaré aún más mi frecuencia de visitas y mi cultura de mediciones posteriores.
Hay que aprovechar que solo vivo a 5 km y que con el coronavirus el tráfico ya no es tan malo.