Protección climática a través de la construcción de viviendas: Llámenme simple, tal vez vea todo esto demasiado sencillo, pero aquí en Alemania no somos los destructores del medio ambiente del mundo. ¡Solo esta exageración con el plástico! Las bolsas de plástico, las pajillas y los hisopos se ven en el supermercado como un gran mal, pero cada vez aparecen más paquetes pequeños en el mercado, donde cada galleta está empaquetada individualmente. O esos terribles "bolsillos exprimibles" con requesón o puré para niños. Las bolsas de té vienen también empaquetadas individualmente, las cápsulas de café, las verduras y las frutas están envueltas individualmente en film plástico. ¿Es necesario?
¿Y de qué sirve que conduzcamos coches eléctricos y usemos bombas de calor, si al final tenemos que comprar la electricidad en el extranjero, de centrales nucleares propensas a fallos en las fronteras de Alemania?
En la construcción de viviendas continúa el asunto. Lo que se pega con aislamiento térmico en las fachadas también tiene que ser producido en algún lugar y – lo que es peor – en algún momento también debe ser desechado. Mi suegra se hizo aislar completamente la casa con aislamiento térmico hace 10 años. Nunca se amortizará; en algunos lugares ya hay daños, zonas verdes, en otros lados se cae el revoque.
También creo que cada uno debería decidir por sí mismo qué tan eficiente quiere que sea su casa. Después de todo, pagamos suficiente por el petróleo, gas y electricidad – cada uno debe calcular por sí mismo con qué estándar y qué consumos está satisfecho.
Claro, también podríamos "cerrar herméticamente" y "envolver" completamente nuestra antigua casa de entramado de madera. Solo costaría unos cientos de miles y conllevaría el riesgo de que finalmente todo se pudra. Entonces mejor gastar unos cuantos euros cada año en un consumo de petróleo (menor del pensado) un poco mayor y mejorar con cuidado.
Donde se podría actuar con bastante fuerza en cuanto a la protección climática sería en los viajes en avión y barco, así como en el transporte marítimo. Los vuelos y viajes simplemente deberían ser más caros, no puede ser que se pueda/deba volar a Barcelona por 30 euros. Eso es un lujo a costa del medio ambiente. Cuando veo que en la agencia de viajes unas vacaciones de 2 semanas en Egipto, con vuelo incluido, cuestan menos que 2 semanas de vacaciones en la costa del mar Báltico, algo está mal. Y tampoco hacen falta plátanos a 1 euro el kilo.