Alessandro
01.04.2021 08:43:33
- #1
Me parece muy interesante cómo sobre todo los hombres siempre mezclan esto: quien gana bien no debe quejarse de las condiciones laborales, y como funcionario público mucho menos.
Como si se pudiera compensar la carga diaria (que por cierto a menudo no es comprensible desde fuera, pero eso es otro tema) con dinero. ¡Ese es un enfoque tan, tan, tan equivocado!
Es que lamentablemente es así (y esa es mi percepción a través de los profesores que conozco), que se quejan o lamentan excesivamente al respecto.
Y sí, cuando se gana bien o muy bien, se pasa por alto más cosas que cuando se tiene que soportar las mismas molestias por menos dinero.
Por un trabajo que paga 10.000,- prefiero pasar una hora en el tráfico de trabajo, que por un trabajo que solo se remunera con 5.000,-.
Si no conviertes tu hobby en profesión, el dinero o el equilibrio entre trabajo y vida personal es la motivación número uno para elegir la carrera.
Y que no todo lo que brilla es oro en el mundo laboral también debería ser claro para todos.
Y como yo mismo pasé muchos años en la escuela, pude observar que la motivación de los profesores disminuye mucho con los años.
Si permites eso en el sector privado, rápidamente quedas fuera.
Reconozco que todos tienen derecho a quejarse y lamentarse, pero especialmente para los profesores funcionarios y sus motivos, desearía que tuvieran que hacer durante una semana otro trabajo que pagara igual de bien.
Mi motivo favorito de queja, que siempre viene de mi cuñado, es que como profesor hay que pagar cada vez más por las vacaciones porque supuestamente siempre se deberían tomar en temporada alta.
Realmente no sé qué más decir ante eso....