Qué tonto ese profesor. ¿Qué tiene de malo los restaurantes, hoteles o cosas así sin niños???
Es mejor que obligar a la gente que solo quiere comer o pasar las vacaciones en paz a escuchar el griterío de los niños. A mí también me gusta tener tranquilidad, por ejemplo en el balneario que es solo a partir de los 16 años.
Tiene ventajas, por ejemplo, si quiero tener una cena romántica con mi pareja, puedo elegir un restaurante donde en el momento en que le doy a mi amada un anillo de diamantes con la pregunta más importante, ningún pequeño travieso correteé como un helicóptero. ¡Eso es genial!
También hay hoteles familiares, allí sé qué esperar. Si quiero tranquilidad, estaría totalmente fuera de lugar. Y las familias pueden estar seguras de que sus hijos pueden jugar sin que la mitad de la gente en el comedor eleve las cejas molesta.
Este tipo de hoteles/restaurantes diseñados de manera diferente tienen sentido para mí.
También mi hermano y mi cuñada, padres de tres niños, encuentran maravilloso que nos encarguemos de los niños un fin de semana y que ellos puedan ir a esos hoteles sin niños o al menos disfrutar un día en el balneario SIN gritos de niños como pareja.
Y aman a sus hijos y esos niños están bien educados. Pero también son vivaces y ruidosos, como todos los niños.