Oh no... todo esto no suena nada bien, siento mucho que ahora te sientas tan mal después de la compra. Sobre los argumentos racionales de por qué esta compra en realidad es una muy buena idea, creo que no hace falta escribir mucho más, ya que vamos a construir en Múnich, los precios de Stuttgart para nosotros en comparación no son realmente un gran problema y con vuestros muy buenos ingresos familiares también son manejables.
Te recomendaría sin duda que te acerques a tu médico de cabecera o, aún mejor, directamente a un centro de asesoramiento para cargas psicológicas porque tu miedo actualmente te paraliza por completo y ya no coincide con la situación objetiva. Durante el coronavirus muchos de nosotros llegamos a nuestros límites absolutos y siempre es mejor buscar ayuda en momentos de sentimientos extremos cuando uno siente que no sabe qué hacer. Describes tu estado emocional con palabras que en mí hacen sonar las alarmas, se leen mucha presión, miedo, pérdida y obligación de rendimiento, aunque debería y podría haber mucha ilusión, emoción positiva, vida familiar armoniosa y alegría por un posible segundo hijo. Si en realidad todo debería estar bien, pero no lo está, creo que en este caso realmente vale la pena mirar detrás de la fachada, la casa aquí solo será el motivo por el que ahora te sientes tan mal, pero podría reaparecer antes de la próxima gran decisión de vida si muchas preguntas más importantes te dan miedo, pero las reprimes y no las miras: ¿Me siento cómodo en el trabajo? ¿Puedo manejar bien las exigencias que se me plantean como trabajador y papá? ¿Por qué me pongo tanta presión a mí mismo, a quién tengo que demostrar qué? ¿Es mi vida matrimonial y familiar bonita y estable o tengo aquí un problema?
Por experiencia sé lo difícil y a veces doloroso que es ocuparse de esas preguntas, pero también lo bien que puede hacer encontrar respuestas a las preguntas reales, entonces suelen resolverse también los otros problemas por los cuales uno realmente buscaba ayuda. Lo que en general me ayuda en la vida fue también la comprensión de que lamentablemente no tenemos nada bajo control pero que la mayoría de las cosas son instantáneas y uno siempre puede cambiar su vida, eso vale para divorcios, ventas de casas, cambios de trabajo y amistades. Imagínate el peor caso posible, ¿qué podría pasarte? Estrés por la construcción, relación tensa y una venta de la casa que en vuestra situación probablemente sería sin pérdidas o incluso con ganancia. ¿O es más bien el miedo a no cumplir con las propias y ajenas expectativas y por eso prefieres asegurarte quedándote en el piso que ya no es adecuado? Ocúpate de la pregunta de por qué sería tan malo si "fracasaras" con esta casa, creo y te deseo que entonces te sentirás mejor y encontrarás una solución para esta respuesta, junto con tu familia.