HansHansen
15.07.2020 11:37:14
- #1
Pero no se trata del compás moral personal. En aquel entonces, en el banco, tampoco me parecía correcto que los padres utilizaran las cuentas corrientes de sus bebés como cuentas de ahorro a la vista, porque en las cuentas corrientes para niños había un 1 % de interés sobre el saldo. En cuanto papá olía una buena inversión en algún lado, el dinero se colocaba nuevamente a su nombre o, si ya había agotado su propio límite de exención de ahorro, se colocaba a nombre del niño. Cuando se agotaba el límite de exención, se solicitaba un certificado NV para el niño y, de repente, las ganancias de capital hasta 8000 euros al año estaban libres de impuestos. Cuando papá compraba un coche nuevo, el dinero se retiraba de nuevo. El dinero entonces solo se regalaba con el propósito de ahorrar impuestos y se retiraba nuevamente tan pronto como se necesitaba.
¿Qué quiero decir con esto? A veces hay situaciones que van en contra de los propios valores morales y que por eso se rechazan. En última instancia, en el ejemplo mencionado y en el caso del OP se aprovechó un vacío en el sistema y así se evitaron cargas fiscales o se posibilitó la concesión de prestaciones transferidas. No estoy celoso, más bien deseo que cada uno que encuentre tal vacío pueda utilizarlo para sí mismo.
Ese es el punto. Cada uno debe decidir por sí mismo si puede vivir con tales trucos cuestionables. Pero también hay que contar con que no a todos les parecerá bien. A la humanidad seguramente no le haría daño que ese tipo de comportamiento disminuyera.