DaGoodness
26.04.2024 10:35:52
- #1
En aquel entonces también estábamos mucho en los mundos de casas prefabricadas y en ferias de construcción y hablamos con muchas empresas constructoras.
Pero siempre tuvimos una sensación extraña en las conversaciones con los vendedores. Sobre todo porque en la pregunta del presupuesto siempre nos miraban con desprecio y directamente decían "Eso puede olvidarlo".
Al final, terminamos gracias a una recomendación con una arquitecta local, que trabaja con muchos artesanos regionales diferentes.
La planificación de costos de la arquitecta fue exacta y pudimos durante la construcción hablar con cada oficio en el lugar para aclarar todo.
Nunca lo hemos lamentado y hasta hoy estamos contentos de haberlo hecho así.
Con algunas empresas artesanas todavía tenemos contacto y se han encargado más trabajos con el tiempo.
La empresa de techadores nos instaló algunos años después una ventana de techo adicional y selló la pérgola construida posteriormente.
El alicatador vino dos veces de vez en cuando y (incluso después de 6 años) realizó pequeñas reparaciones completamente gratuitas.
Por ello, hace dos semanas pudo reemplazar en toda la planta baja el laminado que habíamos puesto nosotros mismos por azulejos (aunque seguramente no sea el más barato).
Muchos de los artesanos son de nuestro pueblo y siempre nos vemos de nuevo en fiestas o al hacer compras.
Pero siempre tuvimos una sensación extraña en las conversaciones con los vendedores. Sobre todo porque en la pregunta del presupuesto siempre nos miraban con desprecio y directamente decían "Eso puede olvidarlo".
Al final, terminamos gracias a una recomendación con una arquitecta local, que trabaja con muchos artesanos regionales diferentes.
La planificación de costos de la arquitecta fue exacta y pudimos durante la construcción hablar con cada oficio en el lugar para aclarar todo.
Nunca lo hemos lamentado y hasta hoy estamos contentos de haberlo hecho así.
Con algunas empresas artesanas todavía tenemos contacto y se han encargado más trabajos con el tiempo.
La empresa de techadores nos instaló algunos años después una ventana de techo adicional y selló la pérgola construida posteriormente.
El alicatador vino dos veces de vez en cuando y (incluso después de 6 años) realizó pequeñas reparaciones completamente gratuitas.
Por ello, hace dos semanas pudo reemplazar en toda la planta baja el laminado que habíamos puesto nosotros mismos por azulejos (aunque seguramente no sea el más barato).
Muchos de los artesanos son de nuestro pueblo y siempre nos vemos de nuevo en fiestas o al hacer compras.