Milo3
26.07.2019 11:47:46
- #1
¡Yo mismo hago mucho trabajo por cuenta propia! Debes ser consciente de que después del trabajo estás en la obra hasta las 8/9, todos los fines de semana, y aun así hay ciertas cosas que deben ser realizadas por profesionales. Hasta ahora (3 meses de construcción) ningún amigo ha estado en la obra, ni siquiera se ha interesado por "cómo va todo". Afortunadamente tengo muchos contactos y los artesanos me permiten hacer trabajos preliminares y de apoyo, es decir, llega el maestro o el oficial solo y facturan por horas. Lamentablemente siempre pago un poco más, porque el buen hombre suele necesitar mucho tiempo para "pensar y leer planos". Un par de cosas más para reflexionar: No quería aceptarlo, pero hay pequeñas cosas y verdaderas tonterías innecesarias que cuestan mucho dinero. En una construcción nueva normalmente desde 1k€. Ejemplo: una escalera prefabricada entregada que el contratista, a pesar de un acuerdo telefónico previo, no pudo colocar en la obra. Así que hubo que alquilar espontáneamente una grúa móvil (1200€... fuera). Cisterna en lugar de pozo filtrante (1600€ solo la cisterna sin trabajo de cimentación con excavadora), tiempos de vacaciones de los artesanos. Por suerte, en mi caso no ha pasado: chapuzas en la obra. Hay infinitos ejemplos al respecto. En mi vecindario dos personas se han visto muy afectadas por esto. En el interior de la construcción sufrirás lo mismo. Partidas en las que no pensaste o que solo salen a la luz después, te cuestan un montón de pasta. He previsto un colchón de 50k, probablemente necesitaré unos 40k... sin embargo, tengo la ventaja de que cada mes, gracias a nuestros salarios, puedo ahorrar 3k o invertirlos adicionalmente en la construcción.
Te guste o no el tono aquí, hoy no te estás haciendo feliz con tu sueño. Me encanta estar en mi obra y trabajar. A mi esposa, en cambio, le falta tiempo para estar conmigo, salir a cenar bonito, comprar ropa para nosotros, darnos gustos. Ella no es derrochadora, pero todas estas cosas eran normales antes de la obra.
Te guste o no el tono aquí, hoy no te estás haciendo feliz con tu sueño. Me encanta estar en mi obra y trabajar. A mi esposa, en cambio, le falta tiempo para estar conmigo, salir a cenar bonito, comprar ropa para nosotros, darnos gustos. Ella no es derrochadora, pero todas estas cosas eran normales antes de la obra.