Sobre el contrato de ahorro para la vivienda: aquí el asesor bancario debe decirte además de las cantidades, cuál es la comisión de conexión (a menudo 1%) y los costos de gestión anuales (a menudo entre 10 y 30 €).
Como ya has entendido correctamente, tras la asignación (en tu caso después de 11 años) cancelas el préstamo bancario de 232000 € mediante el contrato de ahorro para la vivienda. Ya has ahorrado algo más de 80000 €, el resto ahora debes devolverlo al contrato de ahorro para la vivienda. Por supuesto, esto no es sin intereses, sino que la suma se grava con intereses como en un préstamo amortizable. La ventaja del contrato de ahorro para la vivienda es que hoy ya sabes la rentabilidad de la suma completa. Esta es bastante considerable, porque si, por ejemplo, pone un 5%, solo valdría la pena si dentro de 11 años los intereses están claramente por encima del 5%. Tras la asignación también hay una prima (agio) que debe pagarse adicionalmente. Algo también en el rango de los miles. Solo con estas cifras se puede hacer una comparación. Con base en vuestros números había calculado una tasa de interés de aproximadamente el 3,5%. Eso no es realmente bueno.
Con respecto a los intereses, el asesor bancario os ha engañado un poco. Los intereses son solo para el préstamo bancario durante los primeros 11 años y para el préstamo KFW con seguridad de interés durante 20 años. El saldo restante, por supuesto, no está libre de intereses y los intereses del préstamo del ahorro para la vivienda también los ha omitido. Así que se suman otros varios miles de euros. Desde mi punto de vista, la oferta es por ello poco seria, porque no os dijo cosas importantes. Yo no cerraría ahí el contrato. Si os dice que no tenéis que aceptar la asignación si los intereses dentro de 11 años son más bajos que los acordados en el contrato de ahorro para la vivienda, en principio tiene razón, pero entonces pagaríais durante los 11 años claramente más que con un préstamo amortizable puro.
Mi opinión: con un contrato de ahorro para la vivienda se puede establecer un buen financiamiento. Pero siempre depende de los detalles. Si no se entiende bien el sistema, se debería dejar de lado. En la financiación uno debe saber en todo momento qué posibilidades tiene en cada situación. Si ni siquiera se entiende el sistema, no tiene sentido. ¿Qué pasa si se quiere reducir la cuota? ¿Qué pasa si se quiere hacer una amortización extraordinaria (¿en cuál de los 3 bloques)? ¿Puedo prolongar o acortar la financiación?