Experiencias de la casa adosada del medio de una amiga: por dentro no se oye nada de los vecinos. Nada de nada. En la terraza la cosa cambia - se oye cada palabra de los vecinos, lo cual es especialmente maravilloso cuando la vecina está muy influenciada o embobada con el esoterismo.
Con las casas pareadas de nueva construcción aquí será algo similar: estructuralmente, cada mitad es una casa independiente. Debido a que los terrenos son pequeñísimos, las terrazas están unas encima de otras. La casa unifamiliar que está al lado tiene su terraza justo al lado (y además 1 m más alta) - eso será un palco privilegiado para futuros conflictos familiares y matrimoniales, siempre que estos se lleven a cabo en las terrazas de la casa pareada.
Por lo tanto: tanto si es una casa unifamiliar en un terreno pequeño con la terraza contigua al siguiente terreno, como una casa pareada, al final no hace diferencia. Quien ya esté acostumbrado al balcón de un edificio multifamiliar con oyentes arriba, abajo, a la izquierda y a la derecha no tendrá problema con eso.
(¿Debería decirle a nuestro vecino jubilado conflictivo que cuando desayuno, con la ventana entreabierta, escucho cada palabra de sus peleas y gritos en su salón, cuando están ventilando? [ÉL tiene pérdida auditiva, por eso ELLA es aún más ruidosa] )