"Ranziehen" - y ypg fue
Se suponía que era algo gracioso.
En los últimos años he hablado varias veces sobre el tema con colegas, de que los niños (unos 13 y 15 años) querían cada uno un teléfono nuevo. Aunque ya tenían cada uno el teléfono asignado de los padres. Pero tenía que ser un iPhone. Y luego ya existía el pequeño iPhone 3, de repente la memoria no alcanzaba y se exigía uno nuevo. Por supuesto, los colegas mencionados intentaban transmitir a sus hijos una actitud sana hacia el dinero, pero aparentemente son días de lucha y al final uno cede.
Un colega contó abiertamente que su hija se convierte en una chiquilla a los 13 (ropa nueva, maquillaje, etc.) ... nueva escuela, nuevo grupo de chicas. Con la mesada no alcanza. Y cuando esos ojos marrones claros miran así al papá, él tampoco puede ser duro, especialmente porque ellos mismos se permiten varios extras (él una bici de carreras nueva, ella un Thermomix).
Colega mujer: después de 6 años de equitación, la hija (14) tenía que tener uno propio.
Entonces se va a torneos, se necesita un remolque, un traje de equitación de invierno de 500 (de los cuales los padres pagaron 300) es solo un ejemplo.
El hijo (16) está haciendo un aprendizaje. Para eso buscó una habitación como subinquilino en Hamburgo. La tarjeta de transporte mensual y el segundo hogar lo pagan los padres, la comida él mismo. Los fines de semana lo recogen en Hamburgo, porque donde viven los padres (en medio de la nada) no hay transporte público.
Incluso los scouts cuestan dinero: la mochila y el saco de dormir son gastos únicos. También se crece de la ropa rápido, el saco de dormir se incendió en una salida. Uno de 20 € no basta, se suda. En esos viajes se va el fin de semana y en las vacaciones. También hay que pagar algún viaje en tren.
Algunos estados federales no pagan libros de escuela. 160€ por un año más bolso y demás.
Un niño es un talento en rugby. El entrenador lo apoya. Cada fin de semana juegan torneos. Como en el fútbol. Zapatos nuevos, siempre alguna mejora para el equipo. 3 veces al año al sur de Alemania con un cuidador (un padre o madre), para eso una habitación de hotel.
Estos son tres ejemplos espontáneos de familias muy normales, que no están despegadas, pero como padres tienen la obligación de apoyar el único hobby o interés del niño, porque la mesada no alcanza para esas cosas.