¿Están los apartamentos correctamente separados (por ejemplo, en cuanto al acceso), es decir, no hay que pasar por una unidad de vivienda para llegar a la otra? Para el alquiler es prácticamente imprescindible. Para "queremos usarlo como familia como ‘más espacio’ con nuestro hijo de 6 años y (digamos) nuestro hijo de 2 años" más bien poco práctico. ¿Las plazas de aparcamiento encajan también de alguna manera? ¿Los inquilinos también tienen algún espacio al aire libre o decís "no, simplemente no existe. Punto."? (Ahora tampoco es tan inusual en viviendas de alquiler, aunque supongo que la mayoría de los inquilinos desearían al menos una pequeña terraza o balcón si tuvieran la opción, pero también hay bastantes pisos de alquiler sin).
Personalmente, si realmente me llevo más o menos bien con los inquilinos, me molestaría un poco sentirme culpable por desahuciarlos por necesidad propia (y me entraría un "en realidad con los 100 m² que tenemos ya sería suficiente..."). Pero claro, siempre depende. Puede que simplemente pase que ellos también estén buscando algo nuevo (por ejemplo, por aumento familiar) y no haya ningún problema en absoluto.
Por lo demás, crecí más o menos así: una antigua casa de campo, donde en algún momento el establo se convirtió en espacio habitable. Eran como tres unidades de vivienda y con los años nosotros (o más tarde solo mis padres) nos fuimos moviendo un poco entre ellas (al principio como familia ocupábamos una, luego más o menos dos y se hizo una abertura. Ahora la abertura está cerrada, las dos viviendas son las que se alquilan y mis padres viven en la tercera). Se puede hacer, pero de alguna manera siempre es un poco estresante. Como eso no estaba previsto desde el principio, siempre había algo que organizar y como al final es una casa grande y antigua, se ha invertido mucho en reforma y renovación con los años. Todo sigue siendo un asunto más grande que en una casa unifamiliar pequeña.
Que como adolescentes tuviéramos prácticamente una unidad de vivienda para nosotros era sin duda un gran lujo, pero también hizo que nos convirtiéramos un poco en el punto de encuentro juvenil del barrio. Y digamos que las consecuencias no fueron siempre positivas, sin querer aquí desplegar todas las travesuras juveniles de mi hermano y mías ;)