Creo que, de manera subconsciente, ya te has decidido desde hace tiempo - en contra de la pequeña ciudad. Tampoco te ayudará que aquí muchas personas escriban que, debido al precio más barato, hicieron concesiones en la ubicación y no se arrepienten, porque eso podría ser completamente diferente para ti. Creo que, por tus descripciones, queda claro y evidente que la pequeña ciudad no es una opción para ti. Cada uno tiene sus prioridades: para unos es la ubicación del terreno, para otros el tamaño del terreno o de la casa, para algunos la equipación lujosa y para otros la máxima cantidad o duración del crédito que no quieren superar. Cada uno tiene un área en la que no quiere hacer concesiones y cada uno tiene sus "must haves" en mente cuando piensa en su propia casa. Para vosotros la ubicación tiene la máxima prioridad y está bien así. Me temo que no serías feliz en la pequeña ciudad, aunque "objetivamente hablando" siga siendo un terreno bien ubicado (a mí me suena así ;)). Si construyeseis en ese terreno, supongo que nunca estarías completamente feliz. Y seamos sinceros: ¿es ese el propósito? ¿Lo importante es ser propietario, aunque no estés completamente convencido? No lo sé... No quiero desaconsejarte tomar el terreno, pero para mí tus descripciones ya suenan como si vuestra decisión estuviera tomada desde hace tiempo. La experiencia de otros usuarios lamentablemente no te ayudará... si ahora 100 usuarios escriben que hicieron concesiones en la ubicación, TÚ de todas formas no serás necesariamente feliz en ESTE terreno. Solo vosotros debéis decidir cuál es la alternativa: plazo de crédito más largo, no tener propiedad o lo que sea... no es una elección fácil, lo sé.
Nosotros mismos construiremos en un entorno absolutamente rural. Aquí no hay tranvía ni nada parecido... es un pueblo pequeño, en plena zona rural. Así que es un absoluto horror para ti :D. Pero para nosotros nunca fue una concesión. Somos "campesinos", yo crecí en este lugar, nuestros amigos y familias viven aquí (o al menos en alguna de las localidades vecinas), nuestros trabajos están cerca, nos sentimos bien aquí. Para mí nunca fue una opción mudarme a la ciudad, simplemente no es lo mío. Ni para mí ni para mi esposo estuvo nunca en discusión construir una casa en una ciudad y para nosotros desde el principio estuvo absolutamente claro que nos quedaríamos justo aquí. Por eso para nosotros no es una concesión, aunque para muchos otros sería algo impensable construir aquí ;). Que por ello los precios del terreno y también de la construcción sean claramente más bajos que en la ciudad es solo un efecto secundario positivo. Pero tampoco somos grandes ingresos, una casa en la ciudad hubiera sido financieramente inviable para nosotros de todos modos. Pero tuvimos otras prioridades: un terreno de al menos 600 m², ciertos extras que queríamos sí o sí (p.ej. ventilación controlada del aire interior, persianas venecianas en la zona de estar, garaje doble, etc.) y también un límite máximo de crédito que no queríamos sobrepasar. Para nosotros tampoco fue siempre fácil combinar todo esto, pero actualmente parece que lo vamos a lograr :). Solo que: si no fuera así, hubiera preferido no construir nada antes que construir un compromiso con el que nunca estaríamos completamente felices. Entonces habríamos preferido seguir alquilando y ahorrando y esperar que nuestro sueño se cumpliera dentro de algunos años... o comprar una propiedad usada, que aquí son aún más baratas que una vivienda nueva.