Cada persona tiene diferentes procesos de trabajo. Especialmente en la planificación de la cocina, es extremadamente útil, al trabajar en la cocina existente, pensar detenidamente qué es innecesario, qué falta, qué se puede optimizar. Por ejemplo, me alegro de tener un fregadero más grande para poder lavar verduras grandes como la acelga sin mojar todo. Sin embargo, generalmente limpio y corto las verduras sentado en la mesa de la cocina.
Así, cada uno tiene sus propios procedimientos favoritos; por eso, en mi opinión, sería un error imponer a los demás el propio concepto. Cada uno debe saberlo por sí mismo. Por lo tanto, también me parece incorrecto adoptar un concepto ajeno —ya sea del fabricante de cocinas o de Instagram— sin cuestionarlo.