Hola Tobi,
hay muchísimas variantes diferentes, y cada una tiene sus partidarios. Personalmente me gustan las estructuras de pared en las que las funciones de estática, aislamiento y protección contra la intemperie están constructivamente separadas.
En el interior de la pared, en general preferiría un ladrillo de arena caliza a todos los demás, ya que posee la mayor resistencia a la compresión, se pueden fijar muy bien estanterías, etc., se consigue la mejor insonorización y almacena mucho calor (frío). Desventaja: casi ninguna propiedad aislante térmica.
Para el revestimiento exterior siempre favorecería un muro de fachada.
Entonces necesariamente se debe realizar un aislamiento del núcleo (por ejemplo, lana mineral).
La peor variante para mí es una estructura monolítica de pared que consiste exclusivamente en bloque de hormigón celular. Aquí, según los requisitos, normalmente no se necesita aislamiento adicional (KfW 55). Desventaja considerable desde mi punto de vista: debido a la baja masa, casi ninguna protección acústica, casi ningún almacenamiento de calor. Además, los objetos pesados solo se pueden fijar aquí con anclajes químicos.