Un poco de "filosofía" :-):
Me gusta en el pueblo justamente que hay casi de todo. Casas de entramado de 300 años, algún que otro tejado de mansarda, en una parte de los años 60 muchos bungalows y también casas muy modernas (un viticultor tiene, por ejemplo, un magnífico "palacio de cristal") - y no hay que olvidar tampoco los almacenes de los viticultores. En general, para mí resulta mucho más armonioso que casi cualquier barrio nuevo con las típicas colecciones de casas prefabricadas. Claro que sé que nuestro presupuesto no alcanza para una gran arquitectura, pero al menos una construcción "interesante" debería ser posible. Seguro que no será un "tejado a dos aguas estándar" ni tampoco una "villa urbana con tejado a dos aguas número 5" - esto no es una valoración para los que construyen algo así y les gusta, pero a cada uno le gusta algo diferente :) (por ejemplo, a mí también me gusta el estilo brutalista, que muchos encuentran "horrible" - como mi mujer...).
Lo común en todo el pueblo es que los terrenos están todos bastante "llenos" de construcciones. Por eso no siento mala conciencia de construir bastante aquí también. La naturaleza comienza justo al final de la calle en el viñedo y mirar al vecino tampoco es nada atípico en la zona rural (y en nuestro piso en la ciudad tampoco se puede imaginar de otra forma). Hemos decidido conscientemente (!) por un terreno pequeño que se puede construir completamente. Por supuesto entiendo que esto no es para todos "lo suyo". Y seamos sinceros: un terreno de 700 m² también implica que miras al vecino - solo que con 4 metros más de césped ;-). Y claro que hay que ser realista (al menos nosotros): un terreno de más de 1500 m² no está disponible en nuestra región y si algún día hay uno en el mercado, suele costar más de 1 millón de euros.
Bueno, fuera filosofía:
Ya he pensado en un "auténtico" piso superior con el mayor alero posible, tendría el encanto de permitir también la vista hacia el viñedo, quizás también con una pequeña terraza al sureste.