11ant
08.12.2022 18:05:33
- #1
No obstante, os pido que de manera objetiva nos mostréis dónde nos hemos equivocado. Hemos adaptado un borrador existente de un arquitecto a nuestras necesidades. Sí, sabemos que es arriesgado y que a menudo no funciona. Pero, ¿es este el caso aquí solo porque se utiliza la escalera separada como una habitación adicional para la habitación de invitados, se ha transformado el espacio aéreo en un cuarto de servicio y se ha retrocedido un poco la pared norte?
Veo que el tamaño de la casa (y probablemente también el presupuesto) no permite una escalera separada solo del sótano a la planta baja, y para mí sería también una razón suficiente para no tomar tal diseño como material de partida para propios esfuerzos de destilación. A partir de cierto grado de desviación entre la base y el perfil de requisitos/lista de deseos, en primer lugar una casa tipo ya es económicamente contraproducente y prácticamente argumenta ella misma "a favor de una planificación verdaderamente individual", y en segundo lugar me parece que aquí se trata más bien de una plantilla “casa para clientes” (que se adecuan aún menos para ser “más” individualizadas).
Y tengo la sospecha de que esta casa tipo se ofrece con techo plano o de carpa, no con techo a dos aguas.
A ojo podría imaginarme que aquí tenemos como base una Rensch-Haus.
Cuando fuimos al arquitecto, primero guardamos nuestros planos para nosotros y le entregamos nuestro programa de espacios y nuestras ideas, nuestros imprescindibles, posibles y no deseados, y los “nice to be”.
Así es inteligente, y eso debería estar impreso en los álbumes de poesía de todos los constructores de casas: si no puedes mantener tus dedos quietos y quieres diseñar tú mismo algo, al menos no deberías llevar tus borradores y en cualquier caso alegrarte, ya sea por las ideas que los arquitectos propongan si no los “contagias” con tus planos de amateur; o por la ideal y creciente semejanza con lo que habías pensado tú mismo. En la cuarta o, a lo sumo, tercera cita puedes preguntar “de manera ingenua” cómo se explican las desviaciones eventuales — pero nunca “bajando” a los profesionales a tu nivel amateur. Nota: si el arquitecto tiene que “aprender algo” del propietario, pues probablemente ese no sea un “arquitecto”.
Estamos construyendo ahora un diseño de semejante “lacayo del dibujo” y estamos sumamente satisfechos con él. En nuestro caso fue una alternativa muy económica al diseño propio. Sin embargo, hay que decir con honestidad que hasta ahora hemos tenido más suerte que sentido común en varios aspectos.
Me parece que vuestra sensatez ha sobrellevado bien la penetración con una radio Makita, y en mi impresión no tuvisteis tal lacayo del dibujo: no todo contratista general — incluyéndome a mí, como arquitecto contratado — es un lacayo del dibujo en el sentido de “trazar el garabato de los propietarios de forma tan limpia que se pueda colocar bajo un sello”.