Justo cuando quieres ver valor a cambio como cliente que paga, ¡no deberías convertir a un arquitecto en un mero dibujante!
Suena tonto, pero así es.
En la casa 1 tuvimos la experiencia. Teníamos un plano base del contratista general (GU) y encargamos al arquitecto del GU que hiciera algunos cambios para nosotros. Ellos hacen todo eso si se lo pides – el cliente es el rey. También se puede construir así, y de hecho se construyó así. Pero después de 1-2 años viviendo en la casa, te das cuenta de que el plano original del GU hecho por el arquitecto tenía su razón de ser. Y cada cambio que hicimos por nuestra cuenta resultó ser, de una u otra forma, poco práctico. Son cosas que no se reconocen necesariamente en el papel.
En la casa 2, escribimos nuestra lista de requisitos y se la entregamos al arquitecto sin dibujar nada por nuestra cuenta para no cometer el mismo error otra vez.