MadameP
09.03.2019 21:37:52
- #1
Pues primero que nada, ¡gracias a todos por sus opiniones y experiencias!
Exacto. Ese es precisamente nuestro dilema. Es una pena que algo así nunca se pueda prever.
Pues en principio lo que cualquiera espera de un seguro de defensa jurídica. Que no haya costes desagradables / inesperados en caso de que pase algo, cuando ya tienes una financiación/carga súper fuerte... 100.000 por caso suena mucho, pero solo como ejemplo: imagina en el peor de los casos una paralización eterna de la obra, sigues pagando la amortización y además el alquiler, nadie se pone de acuerdo, etcétera, etcétera. Ahí una cobertura alta da tranquilidad.
Vale mínimo 3, máximo 5 años. En nuestro caso, mil euros por año.
Eso no es lo que planeamos. No somos de pleitear ni queremos serlo. Creo en la buena conversación cara a cara.
Nuestro perito y nuestro generalista se conocen desde hace unos 20 años, se cruzaron en la universidad y en algunas construcciones que el perito ha supervisado. No son amigos (y después de conocer a ambos, sospecho por qué), pero tampoco enemigos. Nuestro perito dice cosas como "con él se puede construir" (de otros definitivamente nos ha desaconsejado) y "estamos de acuerdo en que queremos acabar una construcción razonable sin defectos y sin buscar problemas pequeños". Eso me da esperanza de que quizás podamos manejar crisis con diálogo.
Desde el principio mi intuición dice sí al generalista, y un sí rotundo. El hombre es arquitecto por pasión, tiene buenas ideas y ganas con nuestro proyecto, y después de firmar fue siempre accesible, comprometido y amable. Me manda mensajes desde la BAU en Múnich con tejas para proponernos, llama a las 9 de la noche durante una hora para explicar cosas, envía correos tarde como prometió, etc. Además me gusta su humor , aunque eso no es decisivo. Lleva 20 años construyendo casas unifamiliares y multifamiliares aquí en la zona, tiene buena reputación y mucho que perder. Creo que él es más bien perjudicado por clientes quisquillosos que por la noche van con un láser por la obra, miden todo, rubrican cada página del contrato y si hace falta lo llevan a juicio. (Nosotros no somos así, me importan tres pepinos 3-5 cm) Eso fue lo que escuché. La construcción no empezará antes de que vuelva de vacaciones, el terraplén para la losa no lo hace nuestro paisajista, sino SU contratista, aunque sea más caro, etc.
Para no extenderme más. Mi intuición me dijo de alguna manera que puedo dormir tranquilo sin el seguro de defensa jurídica. Solo quería asegurarme de no cometer un error grave. Me habéis ayudado, ¡gracias!
Los 3000 euros son una apuesta. Se puede hacer. A veces se pierde, a veces se gana.
Exacto. Ese es precisamente nuestro dilema. Es una pena que algo así nunca se pueda prever.
¿Qué esperas del seguro?
Pues en principio lo que cualquiera espera de un seguro de defensa jurídica. Que no haya costes desagradables / inesperados en caso de que pase algo, cuando ya tienes una financiación/carga súper fuerte... 100.000 por caso suena mucho, pero solo como ejemplo: imagina en el peor de los casos una paralización eterna de la obra, sigues pagando la amortización y además el alquiler, nadie se pone de acuerdo, etcétera, etcétera. Ahí una cobertura alta da tranquilidad.
¿Cuánto tiempo vale? ¿Solo para la fase de construcción o también si después de 4 o x años aparecen defectos ocultos?
Vale mínimo 3, máximo 5 años. En nuestro caso, mil euros por año.
Y... se arrepienten de haber presionado al buen generalista por culpa de un daño de 500 € en vez de hablar y reclamar su derecho por la vía habitual. Eso todavía vale y funciona también
Eso no es lo que planeamos. No somos de pleitear ni queremos serlo. Creo en la buena conversación cara a cara.
Nuestro perito y nuestro generalista se conocen desde hace unos 20 años, se cruzaron en la universidad y en algunas construcciones que el perito ha supervisado. No son amigos (y después de conocer a ambos, sospecho por qué), pero tampoco enemigos. Nuestro perito dice cosas como "con él se puede construir" (de otros definitivamente nos ha desaconsejado) y "estamos de acuerdo en que queremos acabar una construcción razonable sin defectos y sin buscar problemas pequeños". Eso me da esperanza de que quizás podamos manejar crisis con diálogo.
Pero si, como se menciona a menudo en Nordlys, conoces al contratista, es del pueblo, tiene buena reputación, etc., seguro que se puede prescindir. Si no: leer muy bien las condiciones del seguro y contratar algo así. 3-5k no es mucho.
Desde el principio mi intuición dice sí al generalista, y un sí rotundo. El hombre es arquitecto por pasión, tiene buenas ideas y ganas con nuestro proyecto, y después de firmar fue siempre accesible, comprometido y amable. Me manda mensajes desde la BAU en Múnich con tejas para proponernos, llama a las 9 de la noche durante una hora para explicar cosas, envía correos tarde como prometió, etc. Además me gusta su humor , aunque eso no es decisivo. Lleva 20 años construyendo casas unifamiliares y multifamiliares aquí en la zona, tiene buena reputación y mucho que perder. Creo que él es más bien perjudicado por clientes quisquillosos que por la noche van con un láser por la obra, miden todo, rubrican cada página del contrato y si hace falta lo llevan a juicio. (Nosotros no somos así, me importan tres pepinos 3-5 cm) Eso fue lo que escuché. La construcción no empezará antes de que vuelva de vacaciones, el terraplén para la losa no lo hace nuestro paisajista, sino SU contratista, aunque sea más caro, etc.
Para no extenderme más. Mi intuición me dijo de alguna manera que puedo dormir tranquilo sin el seguro de defensa jurídica. Solo quería asegurarme de no cometer un error grave. Me habéis ayudado, ¡gracias!