Hola a todos,
¡Muchas gracias por las numerosas respuestas! ¿Creen que tiene sentido encargar un estudio del suelo antes de comprar el terreno? Tenemos que dar una confirmación vinculante de compra en dos semanas, de lo contrario el terreno volverá a salir al mercado (nos lo asignaron mediante un sorteo – mucha demanda…). Hemos estado buscando un terreno adecuado durante 5 años – este es nuestro primer vistazo, que de alguna manera no quiero abandonar…
Ya hemos encontrado los límites para arsénico según la Ley de Protección del Suelo:
- 25 mg/kg para parques infantiles
- 50 mg/kg para zonas residenciales
- 125 mg/kg para parques y áreas recreativas
Estamos con 31 mg/kg, es decir, entre parque infantil y zona residencial. La pregunta ahora es cómo deberíamos evaluarlo de forma realista, y tenemos estas opciones:
a) No comprar el terreno: Es más fácil decirlo que hacerlo, porque como se mencionó antes, ya estamos muy involucrados por varias razones importantes. No es que tengamos una gran elección en la región de BW. Por supuesto, también defiendo la opinión "La salud de mi familia siempre es lo primero". Pero si aquí es disparar con cañones a los gorriones es otra cuestión (...aquí siempre pienso en el tema de la famosa salchicha).
b) Comprar el terreno, pero cambiar el suelo: Al final, es una cuestión de costos, que se puede calcular (lo importante es darse cuenta antes de firmar los contratos). ¿Alguien tiene una idea de cuánto costaría eso (600 m², aprox. 90 m² de sótano, casi sin pendiente)?
c) Comprar el terreno y no hacer nada: Al más puro estilo "yo no sé nada". ¿Cuántas personas se habrán ahorrado el informe o no lo leen/entienden y llevan una vida feliz, sana y larga?
¿Qué harían ustedes?