¡Esto es realmente genial! Nosotros también habíamos planeado de manera conservadora y habíamos previsto un montón de margen, pero tal como me conozco, no quiero renunciar a nada y siempre más... entonces tampoco quedará margen
Con esa actitud, probablemente pronto tendréis que recurrir a vuestras garantías...
Y no, no conozco vuestra situación financiera, lo cual (no es por mala) me da igual, porque es vuestro asunto. Tenéis que sentiros cómodos con ello. Solo he dicho que para mí no sería lo mío.
En cuanto al banco: he oído casos en los que a los clientes les ofrecían un 1% de amortización y créditos que no podrían permitirse. Por eso, las garantías no son garantía de una financiación sostenible. Al principio todo suele ser genial... el despertar desagradable llega después del plazo regular, cuando te das cuenta de que ya no puedes permitirte la casa, porque o bien los intereses ahora son más altos o la amortización calculada no se cumplió.
Nosotros también tuvimos que elegir entre 30 años de interés fijo o 20 años, pero con condiciones mucho mejores. Ahora nos cuesta 300 € más de amortización al mes, pero bueno, quiero terminar alguna vez. No vivo solo para la casa ni me esclavizo por ella.
Siempre digo: la casa tiene que servirme a mí, no yo a la casa.
Y así como escribes que no quieres renunciar a nada: ¿de verdad piensas que durante 25 años vais a llevar cada año miles de € al banco para amortizaciones extraordinarias o que no preferiríais gastar ese dinero en cosas que queréis permitiros? Apuesto por lo último... y ¡zas!... el plan se va al traste.
Encuentro irresponsables a los bancos que permiten eso, lo siento. Porque si el respaldo financiero fuera tan excelente, no habría que pedir tanto capital ajeno. Y solo en ese caso no me preocuparía.