Pues yo no creo que el laminado sea tan malo como dice Neige.
Yo sí, porque, reducido a lo esencial, no es más que papel impregnado de resina sobre un material soporte. Aunque es económico y se coloca rápido en una habitación, también es muy sensible a objetos domésticos/juguetes que caen. Lamentablemente tampoco es reparable; el laminado es especialmente malo con el agua.
Recuerdo bien los años 90, cuando todo el mundo tenía que poner laminado en su piso porque era rápido y barato, casi barato. Cada paso hacía eco en el laminado... horrible... tal vez por eso tampoco me gusta; en cualquier caso, no lo quiero en casa.
Hoy en día hay laminados mejores en cuanto a calidad, variedad y nivel de ruido; siguen siendo sensibles y por eso no son adecuados para habitaciones infantiles. En mi opinión, ahí se ofrece un laminado industrial. Sin embargo, en cuanto al precio, este está tan lejos de “bueno y malo” que el parquet — con todas sus opciones de renovación — resulta ser una verdadera ganga.
Hay muy buenas alternativas al laminado si no quiere un suelo clásico de madera o baldosas — por ejemplo, corcho o una bonita moqueta.
Saludos, Bauexperte