Hola Azalee, hola Honigkuchen y a todos los demás,
mucho de lo que Honigkuchen escribe aquí en su aportación puede ser cierto, pero en esta ocasión debo también defender a los muchos arquitectos e ingenieros civiles independientes y autónomos.
También existen ingenieros civiles que realizan planificación de obras. Estos además son capaces de elaborar el cálculo estructural y considerarlo ya de antemano en la planificación, es decir, entienden su profesión en el sentido de los antiguos maestros constructores y también trabajan de esa manera.
Seguro que puede haber alguna oveja negra entre los arquitectos e ingenieros, pero mediante un contrato de arquitecto o ingeniero están exclusivamente obligados a su cliente, el promotor de la obra.
Si en el desempeño de esta actividad defienden otros intereses que no sean los de su cliente, es decir, del promotor, automáticamente incumplen el contrato y eso con todas las consecuencias.
En la HOAI (Ordenanza de honorarios de arquitectos e ingenieros) no solo están regulados los honorarios para estas profesiones, sino también qué servicios deben prestar arquitectos e ingenieros por estos honorarios.
Esto ocurre de forma análoga a las ordenanzas de honorarios de otras profesiones liberales, como por ejemplo abogados (BRAGO), médicos (GOÄ o GOZ), etc.
Cabe señalar además que las tarifas en la HOAI se ajustaron por última vez en 1996, es decir, hace 13 años. Esto significa que esta profesión no ha recibido ningún "aumento salarial" desde 1996.
Seguramente para un promotor pueda ser agradable pagar lo menos posible. La pregunta es, qué servicio está dispuesto a prestar el arquitecto/ingeniero a cambio.
Si un arquitecto o ingeniero factura según las tarifas mínimas según la HOAI, y también debe prestar los servicios requeridos, seguro que esto no es suficiente para el arquitecto/ingeniero, e incluso puede poner en riesgo su existencia.
Aquí hay que tener en cuenta otro punto importante, a saber, que los arquitectos y sobre todo los ingenieros deben garantizar con su actividad la seguridad de los usuarios de los edificios. Este interés público es en parte lo que justifica la existencia de la HOAI.
Porque aquí no puede ni debe tratarse de "barato, barato" o "la tacañería es genial", sino solo de la seguridad de las personas, y esta solo puede garantizarse con un honorario adecuado.
La construcción de un edificio a través de una oficina independiente de arquitectura o ingeniería también proporciona al promotor muchas ventajas.
Además, es un gran error creer que realizar la obra a través de una empresa llave en mano, un promotor inmobiliario, contratista general o un proveedor de casas prefabricadas siempre es la forma más económica.
Solo una comparación precisa de costos, que tenga realmente en cuenta todos los costos, puede dar aquí claridad.
El arquitecto o ingeniero, como director de obra, también es responsable ante su promotor respecto a la calidad entregada por los artesanos. El director de obra de una empresa llave en mano o similar solo responde ante su empleador, pues depende de él.
Espero haber aportado un poco más de claridad con esto.
Atentamente
Danton
Ingeniería y oficina de planificación
Dipl.-Ing. Thomas Brandenburg
Ingeniero consultor y perito de construcción
Especialista en seguros (contrato de obra)