Hay arquitectos que a menudo tampoco consideran el edificio como un concepto global.
Eso aplica a " warnt" arquitectos con frecuencia, y a los "arquitectos" aún más. Pero eso no significa que sea bueno tomar la planificación como un aficionado y hacerla asunto del jefe.
También es muy difícil al mismo tiempo tener en cuenta el interior, el exterior y la planificación detallada relacionada.
También recomiendo encarecidamente no querer hacer una planificación todo en uno de etapa única, en la que se intenta procesar las fases de anteproyecto, proyecto y planificación detallada en un único dibujo 3D a color. Lamentablemente, el popular software de simulación clic, chillon y tridimensional invita a eso (o al menos no lo desaconseja). Sin embargo, es un malabarismo que los planificadores profesionales evitan por una buena razón. Un anteproyecto no solo puede ser garabateado, sino que incluso debería serlo. En esta etapa solo se trata de visualizar la demostración de que la idea conceptual, traducida en una configuración de volúmenes de construcción, puede ser una cuenta balanceada. Quien ya pulía detalles en esa fase, haría mejor en declararse enemigo a sí mismo. Esa es precisamente la diferencia entre querer imitar el modo de trabajo de un verdadero profesional o el de un auténtico novato.
Te has olvidado una palabra. El "lassen" detrás de "überarbeiten". Cuando sale un proyecto con una vista exterior así en un aficionado, es mejor aconsejar ir al arquitecto.
Pero con más cuidado, de lo que la autora del tema aquí ha experimentado.