Es también un poco una cuestión de mentalidad. Nosotros los alemanes tendemos siempre a acumular (material) posesiones. No quiero decir aquí: vender a cualquier precio, pero al revés tampoco siempre tiene sentido. Básicamente, el TE tiene razón en que casi siempre hay arrendatarios interesados, pero en nuestra región el arrendamiento está a un nivel relativamente bajo. La rentabilidad del capital es por lo tanto muy baja. Desde mi punto de vista, la gran ventaja de la tierra es que no pierde valor (a diferencia de la casa propia). Pero, como dije, siempre depende individualmente de las circunstancias. En muchos casos no se piensa tanto en eso, ya que muchos propietarios de tierras no son el tipo típico de clientes que se informan intensivamente sobre estrategias de inversión, etc.