WilderSueden
30.01.2024 20:45:43
- #1
No tiene que ser un súper acabado especial o metálico. Incluso cambiar de blanco liso a azul liso puede ser caro. Al final, la discusión es inútil. Tu contratista no es el subcontratista que realmente instala la puerta principal. Tu contratista es el contratista general y tenéis una descripción del trabajo como parte del contrato para la puerta principal X. Era vuestra tarea pensar antes de firmar si la queríais o no. Y si hubierais querido otra (no hablamos ahora del color, sino de la comparación entre un Golf y un Mercedes), el momento correcto habría sido incluir la puerta correspondiente en la descripción del trabajo durante la fase de oferta. Ahora queréis la puerta Y y por eso el contratista general puede pedir prácticamente cualquier precio, sin importar cuánto le cueste esa otra puerta. Por eso es tan importante que un contratista general en su estándar se ajuste lo mejor posible a vuestro nivel de deseo. Los incrementos de precio de cualquier tipo siempre son mucho más caros que los costes adicionales reales. En la fase de oferta aún podíais haber elegido otro contratista general con total facilidad...Para seguir con el ejemplo del coche, si ahora elijo un color de coche que no es un pintado común, sino un súper acabado especial metálico, está claro que pago el recargo. Pero el concesionario no va, mira el coche y dice: "oh, color bonito, por eso me gustaría un 25% más".