hampshire
19.11.2021 13:11:31
- #1
Pero yo todavía sigo pensando que es extremadamente laborioso comparar con exactitud.
Yo también comparto esa opinión. Por eso, dos alternativas a la comparación "exacta", que ambas funcionan:
Mis suegros eran seguidores del equivalente británico de Stiftung Warentest y se guiaban por sus valoraciones. Les fue bien con ello y tuvieron pocos problemas para decidir. Si después un aparato no resultaba tan bueno, tenían la presunta certeza de que todos los demás habrían sido aún peores. Autoengaño que funciona.
Soy súper curioso y leo todo lo que cae en mis manos y aprendo cómo funcionan las cosas, quién las inventó y con qué motivación, cómo se implementan aparentemente las mismas funciones de manera diferente, qué representan las empresas productoras, qué modelos de negocio tienen... Para eso casi nadie tiene tiempo, yo prefiero hacerlo antes que, por ejemplo, ver televisión y así "ahorro" tiempo. Al final, decido de todos modos por intuición, porque en toda la investigación locamente extensa surgen proveedores que me resultan más simpáticos que otros. Rara vez hay una mala compra, y admitirlo tampoco me gustaría mucho - ni siquiera ante mí mismo. ;) Autoengaño que funciona.
Pero quien intenta revisar todo de manera totalmente objetiva y "segura", siempre vive con dudas sobre su decisión. Aunque esa decisión objetivamente fuera "la mejor", la duda persiste. Es una tontería vivir así, ¿no?