ypg
29.01.2019 09:52:33
- #1
Antes pensaba igual: una miserable tutela.
Ahora me parece muy agradable que no todos puedan hacer lo que quieran. Aunque me molesta menos el color de la casa que los desiertos de piedras/gabiones y muros de hormigón.
Cada uno lo ve de una manera distinta, y generalmente no se puede prescindir de las normas.
Cada uno tiene un límite diferente al dolor.
También creo que está bien que hayan prohibido entre nosotros la plantación perenne en los cementerios, como los thuja y similares. Nadie sufre mucho por cumplir con eso. La mayoría quiere usar esa plantación porque no conocen otra cosa.