ypg
09.06.2015 12:47:31
- #1
Hola,
¿Qué es un receptor?
Mmm, en realidad el problema no es subir de inmediato al entrar en la casa (creo que en general se ha extendido la costumbre de dejar los zapatos arriba), sino que por la noche, cuando todos están listos para dormir (también los adultos), vuelven a bajar y entonces pisan la suciedad de la calle (con calcetines o descalzos).
Lo digo así: en nuestra casa siempre está limpia, pero me molestan incluso los pocos granos de arena que caen en el pasillo. Además, soy sensible en los pies. Cuando pienso que antes estuve en los baños públicos de OBI o Ikea, donde quizás tuve que estar sobre humedad porque una madre sostenía a su hijo sobre el inodoro y no se orinó dentro, sino que solo por fuera, me da escalofríos. De lo que más entro y luego distribuyo por la casa, prefiero no pensar demasiado.
Crecí con escaleras en la zona de estar y sólo tuve ese tipo, por lo que también presto atención a una pequeña distancia entre la puerta y las escaleras.
Sin embargo, la ubicación de las escaleras es una buena base para la situación de las habitaciones superiores, por lo que en parte es el mal menor tenerlas en la entrada.
Saludos, Yvonne
Tengo un receptor en el pasillo, incluso a distancia de paso, en esta época del año (y con lluvia)
¿Qué es un receptor?
Hasta ahora tampoco he entendido cuál es la ventaja de no poder subir directamente las escaleras, sino tener que esparcir primero unos metros de suciedad de la calle en el recibidor (especialmente los niños lo hacen bien) y luego llevarla arriba conmigo? Preferiría tener la suciedad de la zona de entrada allí mismo, antes que en las habitaciones contiguas
Mmm, en realidad el problema no es subir de inmediato al entrar en la casa (creo que en general se ha extendido la costumbre de dejar los zapatos arriba), sino que por la noche, cuando todos están listos para dormir (también los adultos), vuelven a bajar y entonces pisan la suciedad de la calle (con calcetines o descalzos).
Lo digo así: en nuestra casa siempre está limpia, pero me molestan incluso los pocos granos de arena que caen en el pasillo. Además, soy sensible en los pies. Cuando pienso que antes estuve en los baños públicos de OBI o Ikea, donde quizás tuve que estar sobre humedad porque una madre sostenía a su hijo sobre el inodoro y no se orinó dentro, sino que solo por fuera, me da escalofríos. De lo que más entro y luego distribuyo por la casa, prefiero no pensar demasiado.
Crecí con escaleras en la zona de estar y sólo tuve ese tipo, por lo que también presto atención a una pequeña distancia entre la puerta y las escaleras.
Sin embargo, la ubicación de las escaleras es una buena base para la situación de las habitaciones superiores, por lo que en parte es el mal menor tenerlas en la entrada.
Saludos, Yvonne