EveundGerd
17.12.2015 13:08:34
- #1
La Reina de las Nieves y compañía: Confieso que tuve que sonreír y no puedo quitarme la sonrisa de la cara.
Cuando nuestro hijo era pequeño, su habitación estaba superpoblada. Los habitantes eran Pokémon. Después llegaron los mazos de cartas y Yu-Gi-Oh.
Con nuestra hija fuimos castigados dos veces: Teletubbies y El oso en la gran casa azul, casi al mismo tiempo.
El amoroso abuelo (¡mi padre!) salió y regresó con cuatro grandes criaturas. Todas cantando y moviéndose mientras cantaban la canción de Lala o la canción de los Teletubbies.
La ropa de cama de esa época volvió a aparecer durante la mudanza.
¿Se podía desechar? ¡No! Cada uno de nuestros hijos (17 + 20) quiso conservar su ropa de cama.
Diversos peluches incluidos, Klein-Pop aún hoy duerme con ellos en la cama. ¡Ahora se llama culto!
Mi hermana conoce algo similar. En la habitación de su niña es Monster High.
Cuando nuestro hijo era pequeño, su habitación estaba superpoblada. Los habitantes eran Pokémon. Después llegaron los mazos de cartas y Yu-Gi-Oh.
Con nuestra hija fuimos castigados dos veces: Teletubbies y El oso en la gran casa azul, casi al mismo tiempo.
El amoroso abuelo (¡mi padre!) salió y regresó con cuatro grandes criaturas. Todas cantando y moviéndose mientras cantaban la canción de Lala o la canción de los Teletubbies.
La ropa de cama de esa época volvió a aparecer durante la mudanza.
¿Se podía desechar? ¡No! Cada uno de nuestros hijos (17 + 20) quiso conservar su ropa de cama.
Diversos peluches incluidos, Klein-Pop aún hoy duerme con ellos en la cama. ¡Ahora se llama culto!
Mi hermana conoce algo similar. En la habitación de su niña es Monster High.