HeimatBauer
12.12.2023 09:31:34
- #1
Tres ejemplos de mi círculo directo de amigos, en todos ellos soy huésped frecuente.
1. Quiso imperativamente tener el piano de cola decorativo en la sala de estar. Resultado: el piano de cola se fue desplazando cada mes un poco más hacia la esquina tanto como fue posible, ahora solo sirve como superficie para colocar "restos mezclados" y es muchas cosas, pero no decorativo. Apenas pasa una visita sin que se discuta sobre el mal uso y uso del piano de cola.
2. Compró una casa extremadamente generosa con un vestíbulo de entrada real con un piano de cola extremadamente decorativo. La primera vez que estuve en la casa, me habló durante horas sobre ese piano y los chakras de ese piano. Esa pieza era simplemente poco práctica y siempre estorbaba; a los niños no les importaban los chakras del piano, solo querían dejar sus chaquetas de invierno mojadas - así que se reformó el piso superior para que el piano cupiera allí y lo trasladaron para allá. Allí arriba el piano apenas tiene espacio, pero nada más; la acústica es mala y tampoco da alegría.
3. Es una conocida cantante de ópera y tiene en casa una pequeña sala para actuaciones en la que hay dos pianos de cola. No pasó ni un minuto con dibujos sino que fue a un experto, quien le diseñó una sala maravillosa en la que también la acústica es buena. Ella es la única persona que disfruta con sus pianos de cola.
Tres ejemplos por supuesto no tienen validez general pero son los únicos ejemplos que conozco personalmente y todos van en una dirección muy similar.
1. Quiso imperativamente tener el piano de cola decorativo en la sala de estar. Resultado: el piano de cola se fue desplazando cada mes un poco más hacia la esquina tanto como fue posible, ahora solo sirve como superficie para colocar "restos mezclados" y es muchas cosas, pero no decorativo. Apenas pasa una visita sin que se discuta sobre el mal uso y uso del piano de cola.
2. Compró una casa extremadamente generosa con un vestíbulo de entrada real con un piano de cola extremadamente decorativo. La primera vez que estuve en la casa, me habló durante horas sobre ese piano y los chakras de ese piano. Esa pieza era simplemente poco práctica y siempre estorbaba; a los niños no les importaban los chakras del piano, solo querían dejar sus chaquetas de invierno mojadas - así que se reformó el piso superior para que el piano cupiera allí y lo trasladaron para allá. Allí arriba el piano apenas tiene espacio, pero nada más; la acústica es mala y tampoco da alegría.
3. Es una conocida cantante de ópera y tiene en casa una pequeña sala para actuaciones en la que hay dos pianos de cola. No pasó ni un minuto con dibujos sino que fue a un experto, quien le diseñó una sala maravillosa en la que también la acústica es buena. Ella es la única persona que disfruta con sus pianos de cola.
Tres ejemplos por supuesto no tienen validez general pero son los únicos ejemplos que conozco personalmente y todos van en una dirección muy similar.