Tenéis que explicarle a vuestro interlocutor cómo queréis vivir en la parcela concreta, o mejor dicho, cómo os la imagináis inicialmente. Casi nunca hay demasiada información. Son deseables:
- Información sobre la parcela, por ejemplo, extracto catastral, plan de urbanismo, información sobre edificaciones vecinas existentes/futuras. (Si falta algo, en parte puede conseguirlo el arquitecto, o él/ella os dirá qué es lo que aún hace falta.)
- Vuestro programa de espacios: qué habitaciones queréis habitar, qué tamaño deben tener, qué relación deben tener entre ellas (cocina abierta, qué va en cada planta), éventuellement también qué vistas queréis tener desde dónde
- Vuestras ideas sobre el diseño exterior del edificio o sobre el estilo preferido
- Requisitos, cosas a evitar, expectativas de presupuesto
Al principio todo está aún en flujo. Durante las primeras conversaciones, una visita al lugar y en las fases en que se elaboran los bocetos y se dibujan los planos, los deseos se concretarán o cambiarán, también mediante un intercambio de información mutuo, lo que hace que todo sea aún más interesante.