11ant
10.06.2020 13:42:07
- #1
Es un cálculo simplista en varias dimensiones: Suposición errónea 1) Desde el principio obtenemos ganancia con el alquiler (bases falsas, entre otras, sin vacancias, pagos puntuales, ningún daño no cubierto por el depósito, en la casa nueva no habría motivos para reducción del alquiler, etcétera); Suposición errónea 2) Por la ganancia, los metros cuadrados alquilados son en la resta "carga de amortización menos ingresos por alquiler" más valiosos que los metros cuadrados de uso propio, con lo que el apartamento anexo no solo se financia a sí mismo sino también, por ejemplo, los metros cuadrados del despacho, baño infantil o los ganados con la elevación del techo; Suposición errónea 3) - y en este punto debería empezar a caerle la ficha al propio simplista - Si, dadas nuestras condiciones crediticias, la solicitud de un crédito para una vivienda propia (= inversión para consumo propio de espacio habitable) se vuelve difícil con condiciones exigentes, será más fácil, en vez de lógicamente más difícil, si la combinamos con una segunda solicitud de crédito para un negocio como arrendador (= especulación con ganancias comerciales). Vista así, espero que sea un claro caso de "te das cuenta tú mismo". Los apartamentos anexos son un instrumento de una época en la que, en lugar del §10e, aún regía el §7b de la Ley del Impuesto sobre la Renta (y el canciller federal en funciones era Helmut Schmidt). Pero entonces también teníamos paredes exteriores monolíticas de 30 cm como estándar, incluso con nichos para radiadores. Ha pasado mucho tiempo desde entonces. Que los cálculos funcionen (puedan funcionar) no es absoluto, es decir, no se puede asumir continuidad o siquiera indefinición para ello. Eso es cosa del pasado.Es una ilusión pensar que un inquilino financia en gran parte una casa