nos recomendaron montar los zócalos para nuestro suelo de corcho solo unos años más tarde, ya que el mortero aún puede asentarse y entonces puede formarse una junta. Además, también debido a la humedad residual y al riesgo de moho. ¿Cuál es la opinión en el foro al respecto?
Hola "Hausbaer".
Si el subsuelo, aquí el mortero, aún tuviera una humedad residual (como temes) demasiado alta, la aptitud para colocar el mortero aún no se habría alcanzado. ¡Por lo tanto, tampoco debería colocarse!
Pero si la sequedad adecuada del subsuelo ha sido confirmada por mediciones, tu temor es totalmente infundado.
Todo mortero mineral (húmedo) tiende a curvarse en los bordes debido al secado. En los morteros de cemento este proceso es, por cierto, característico del material y no siempre se puede evitar, en los morteros de sulfato de calcio la curva es normalmente muy pequeña y despreciable.
En el caso de zócalos de baldosas estaría de acuerdo contigo en esperar un tiempo para la instalación. Pero con suelo de corcho y zócalos habituales no.
La curvatura inversa de los bordes del mortero, aunque más tarde se haga visible como junta por un levantamiento mayor, no se puede evitar.
Pero renunciar a la instalación pronta de los zócalos por eso me parece completamente exagerado.
Porque justamente no conoces el grado de curvatura de los bordes (y por lo tanto tampoco la curvatura inversa, que más tarde provocaría formación de juntas debajo de los zócalos) y ahora, para usar una metáfora, ya estás preparando los cañones cuando las gorriones aún ni se han posado en el tejado.
Para resumir: ¡con un subsuelo suficientemente seco coloca el suelo de corcho y pon los zócalos!
Saludos:
KlaRa