¿Ahora la hija o tú? Los artesanos tienen razón, ustedes presumen y pagan...
Financiamos la casa de la hija.
No presumimos, eso no está en nuestra mentalidad ni lo necesitamos.
Si acepto ciertos precios que están inflados, espero un rendimiento correspondiente.
Así lo conozco de mi negocio y lo mismo espero de mis socios comerciales.
Parece que la industria de la construcción no considera necesaria esta costumbre en este momento.
Por lo demás, encuentro tu comentario inapropiado.