El efecto no es enorme, pero sí está presente. Lo tomaría una y otra vez, porque baja de 1 a 2 grados (y 25 o 23 grados en el dormitorio ya pueden hacer una gran diferencia), casi sin costos continuos. Con esto extraes permanentemente calor de los grandes acumuladores térmicos de la casa ([Estrich], [Betondecke], ...). No mucho de una vez, pero sí 24 horas al día y así evitas que se produzca un sobrecalentamiento excesivo.
Por supuesto, no puedes enfriar contra una gran fachada sur sin sombra, pero es un complemento excelente que, combinado con una buena sombreado, funciona muy bien y puede mantener una casa fresca.