Para mí sería demasiado arriesgado que después del traslado no esté todo bien sellado, que al romper el suelo radiante se dañe la calefacción por suelo radiante o que surja algún otro problema técnico. Sí, se ve fatal. Pero las filtraciones serían aún peores. Aparte de eso, ¿una empresa también tiene que hacer reparaciones en un marco "desproporcionado"? Se trata "solo" de un defecto estético, que solo con quitar y volver a colocar las baldosas ya genera un gasto de varios cientos de euros. Luego probablemente trabajos en el suelo, desvío de las tuberías... No me imagino que se pueda tener razón en eso...