La intuición dice que ustedes deberían haber comprobado la corrección antes de la instalación, ya que ustedes ordenaron las placas. La desmontaje y nueva instalación sería entonces su responsabilidad.
La devolución y nuevo suministro sería asunto del proveedor.
Sería cuestionable cómo valorar la depreciación de la mercancía ya instalada.
Si no hay nada dramáticamente en contra del tono de color, un descuento para todos seguramente sea la mejor opción.