ypg
10.02.2015 23:59:47
- #1
esto es lo que he encontrado para vosotros - Yvonne os desea mucho disfrute al leer
Quien construye una casa, hace bien en pensar desde el principio en la distribución. El análisis minucioso de las propias necesidades de vivienda, así como de los procesos para un día a día sin estrés, dará sus frutos.
Al inicio de la planificación, todos los futuros usuarios deberían ocuparse de sus necesidades de vivienda y hábitos de vivienda. La mejor manera de hacerlo es mediante preguntas concretas. Un tema típico es la planta abierta: ¿Soy el tipo de persona que quiere una cocina abierta, en la que no sólo los cocineros gourmets, sino también los olores puedan extenderse libremente – hasta la sala de estar? ¿Realmente quiero mostrar mi montaña de platos sucios al “público”, o prefiero una puerta para separar este espacio de trabajo? Así podría ser el comienzo de un cuestionario de este tipo.
El terreno determina la planta
La planificación de la distribución ya comienza con la selección del terreno, porque la forma y el tamaño del solar influyen decisivamente en el diseño de la casa. Por ejemplo, las casas en pendiente son menos flexibles en cuanto a la disposición de las habitaciones. Sólo la cuestión de dónde se accede a la casa es esencial aquí. Por sencillo que parezca: tampoco se debe olvidar el mobiliario. Los grandes muebles necesitan no solo el espacio donde ubicarse, sino también espacio para poder actuar adecuadamente. Y los armarios necesitan una pared donde colocarse.
Planificación de la planta para sentirte bien
“La distribución contribuye decisivamente al bienestar de los habitantes”, escribe Bettina Rühm en su libro “La planta óptima”. Es cierto, porque si ésta no se ajusta a sus usuarios, genera situaciones de estrés – y esto a diario. Si a una familia de cuatro miembros le falta un segundo baño, los conflictos están asegurados. Esto también ocurre si faltan posibilidades de retiro en la zona de estar: si alguien no puede relajarse viendo la televisión porque otro está haciendo ruido con los platos en la cocina, quizá una planta abierta para su casa no sea la solución correcta – incluso si parece muy espaciosa y moderna.
Principios que realmente ayudan
“Una buena planta se caracteriza por reflejar los hábitos de vida de los habitantes en cuanto a la circulación, el tamaño de las habitaciones y la asignación de espacios, y por facilitar sus rutinas diarias”, continúa escribiendo la ingeniera Rühm. Cada pareja constructora y cada familia que construya su casa debe desarrollar para sí misma la planta adecuada. Sin embargo, existen algunos principios que ayudan en la correcta planificación de la planta. Así, una casa siempre debería ofrecer ambas cosas: espacio para la comunicación y espacio para el retiro. Un cambio entre apertura y cierre no tiene por qué ser un mal compromiso, sino que puede representar una solución variada y coherente. También es importante: siempre pensar en espacios de almacenamiento y áreas de movimiento suficientes. Y: planifique a largo plazo en lo posible. Las habitaciones deben poder usarse de maneras distintas, unirse de forma variable y volver a separarse.
Qué se debe tener en cuenta en la planificación de la planta
¡De ninguna manera debería diseñarse una casa solo por su apariencia exterior! Idealmente, a partir del juego entre la planta y la fachada surge la casa de ensueño en la que se vive bien.
Quien construye una casa, hace bien en pensar desde el principio en la distribución. El análisis minucioso de las propias necesidades de vivienda, así como de los procesos para un día a día sin estrés, dará sus frutos.
Al inicio de la planificación, todos los futuros usuarios deberían ocuparse de sus necesidades de vivienda y hábitos de vivienda. La mejor manera de hacerlo es mediante preguntas concretas. Un tema típico es la planta abierta: ¿Soy el tipo de persona que quiere una cocina abierta, en la que no sólo los cocineros gourmets, sino también los olores puedan extenderse libremente – hasta la sala de estar? ¿Realmente quiero mostrar mi montaña de platos sucios al “público”, o prefiero una puerta para separar este espacio de trabajo? Así podría ser el comienzo de un cuestionario de este tipo.
El terreno determina la planta
La planificación de la distribución ya comienza con la selección del terreno, porque la forma y el tamaño del solar influyen decisivamente en el diseño de la casa. Por ejemplo, las casas en pendiente son menos flexibles en cuanto a la disposición de las habitaciones. Sólo la cuestión de dónde se accede a la casa es esencial aquí. Por sencillo que parezca: tampoco se debe olvidar el mobiliario. Los grandes muebles necesitan no solo el espacio donde ubicarse, sino también espacio para poder actuar adecuadamente. Y los armarios necesitan una pared donde colocarse.
Planificación de la planta para sentirte bien
“La distribución contribuye decisivamente al bienestar de los habitantes”, escribe Bettina Rühm en su libro “La planta óptima”. Es cierto, porque si ésta no se ajusta a sus usuarios, genera situaciones de estrés – y esto a diario. Si a una familia de cuatro miembros le falta un segundo baño, los conflictos están asegurados. Esto también ocurre si faltan posibilidades de retiro en la zona de estar: si alguien no puede relajarse viendo la televisión porque otro está haciendo ruido con los platos en la cocina, quizá una planta abierta para su casa no sea la solución correcta – incluso si parece muy espaciosa y moderna.
Principios que realmente ayudan
“Una buena planta se caracteriza por reflejar los hábitos de vida de los habitantes en cuanto a la circulación, el tamaño de las habitaciones y la asignación de espacios, y por facilitar sus rutinas diarias”, continúa escribiendo la ingeniera Rühm. Cada pareja constructora y cada familia que construya su casa debe desarrollar para sí misma la planta adecuada. Sin embargo, existen algunos principios que ayudan en la correcta planificación de la planta. Así, una casa siempre debería ofrecer ambas cosas: espacio para la comunicación y espacio para el retiro. Un cambio entre apertura y cierre no tiene por qué ser un mal compromiso, sino que puede representar una solución variada y coherente. También es importante: siempre pensar en espacios de almacenamiento y áreas de movimiento suficientes. Y: planifique a largo plazo en lo posible. Las habitaciones deben poder usarse de maneras distintas, unirse de forma variable y volver a separarse.
Qué se debe tener en cuenta en la planificación de la planta
[*]Un buen enfoque es analizar detalladamente la situación actual de vivienda: ¿Qué funciona bien y dónde hay factores de estrés? ¡Cuanto más precisas sean las respuestas, mejor será la planificación de la planta!
[*]Importantes también son las preguntas sobre las típicas rutinas diarias: ¿Cuándo se utiliza qué habitación? ¿Queremos la zona de comedor más bien al sol de la mañana o al atardecer?
[*]Y se trata de hábitos queridos: ¿Se invita a menudo a muchos invitados? Entonces no sólo se debe planificar espacio para una mesa grande de comedor, sino también dimensionar generosamente la entrada.
¡De ninguna manera debería diseñarse una casa solo por su apariencia exterior! Idealmente, a partir del juego entre la planta y la fachada surge la casa de ensueño en la que se vive bien.