alexfrank
26.09.2012 08:51:45
- #1
Hola comunidad,
Ikea suele ser aceptable en cuanto a calidad y marginalmente más barato que otras alternativas.
Pero cuando hay un problema, todo se complica.
Compré un lavabo junto con el mueble de Ikea.
Después de la instalación resultó que el lavabo no está recto, sino que está deformado cónico hacia arriba en el centro.
Después de la reclamación, me ofrecieron en la tienda un reembolso del 10% del precio de compra, o alternativamente que alguien venga y lo sustituya todo. Elegí la segunda opción, porque ni siquiera respondo al teléfono por un 10%. Ahora empieza toda la pesadilla:
- en la primera cita no apareció nadie
- en la segunda cita, el lavabo de reemplazo estaba defectuoso; no se pudo montar
- antes de la tercera cita pedí que se realizara un control de salida de mercancía - sin éxito, porque en la tercera cita nadie pudo revisar el lavabo antes: lavabo de reemplazo defectuoso; no se pudo montar
- en la cuarta cita los técnicos intentaron quitar el lavabo antiguo - no pudieron sacarlo y dijeron que también tendrían que cambiar el mueble (que no estaba incluido). No fue posible el cambio.
Al menos desde hace dos meses hay un lavabo de reemplazo en el garaje, que está en buen estado. Pero nadie de Ikea se comunica conmigo. ¿Me habrán olvidado?
Cuando envié todo esto a la dirección de Ikea con la petición de que me reembolsen el mueble junto con el lavabo y simplemente me dejen en paz (aunque parezca increíble, trabajo además y no tengo tiempo para ocuparme de cosas tan innecesarias), solo recibí otra llamada de Ikea pidiéndome que acuerde otra cita.
Conclusión: El lavabo con mueble no fue barato, costó unos 500 euros, y los costes adicionales y el tiempo invertido hasta hoy no se pueden recuperar!!! Si hubiera elegido un modelo de 1000 euros en una tienda especializada en saneamiento, habría salido más barato y con mejor calidad. No me volverá a pasar.
¡El servicio en Ikea es una vergüenza!
Teniendo en cuenta que sólo este año he comprado allí por más de 8.000 euros.
El lavabo de reemplazo sigue en mi sótano después de cuatro intentos fallidos de reparación. Veremos qué otras sorpresas tiene Ikea preparadas y, sobre todo, qué se romperá durante la retirada.
Iré informando.
Ikea suele ser aceptable en cuanto a calidad y marginalmente más barato que otras alternativas.
Pero cuando hay un problema, todo se complica.
Compré un lavabo junto con el mueble de Ikea.
Después de la instalación resultó que el lavabo no está recto, sino que está deformado cónico hacia arriba en el centro.
Después de la reclamación, me ofrecieron en la tienda un reembolso del 10% del precio de compra, o alternativamente que alguien venga y lo sustituya todo. Elegí la segunda opción, porque ni siquiera respondo al teléfono por un 10%. Ahora empieza toda la pesadilla:
- en la primera cita no apareció nadie
- en la segunda cita, el lavabo de reemplazo estaba defectuoso; no se pudo montar
- antes de la tercera cita pedí que se realizara un control de salida de mercancía - sin éxito, porque en la tercera cita nadie pudo revisar el lavabo antes: lavabo de reemplazo defectuoso; no se pudo montar
- en la cuarta cita los técnicos intentaron quitar el lavabo antiguo - no pudieron sacarlo y dijeron que también tendrían que cambiar el mueble (que no estaba incluido). No fue posible el cambio.
Al menos desde hace dos meses hay un lavabo de reemplazo en el garaje, que está en buen estado. Pero nadie de Ikea se comunica conmigo. ¿Me habrán olvidado?
Cuando envié todo esto a la dirección de Ikea con la petición de que me reembolsen el mueble junto con el lavabo y simplemente me dejen en paz (aunque parezca increíble, trabajo además y no tengo tiempo para ocuparme de cosas tan innecesarias), solo recibí otra llamada de Ikea pidiéndome que acuerde otra cita.
Conclusión: El lavabo con mueble no fue barato, costó unos 500 euros, y los costes adicionales y el tiempo invertido hasta hoy no se pueden recuperar!!! Si hubiera elegido un modelo de 1000 euros en una tienda especializada en saneamiento, habría salido más barato y con mejor calidad. No me volverá a pasar.
¡El servicio en Ikea es una vergüenza!
Teniendo en cuenta que sólo este año he comprado allí por más de 8.000 euros.
El lavabo de reemplazo sigue en mi sótano después de cuatro intentos fallidos de reparación. Veremos qué otras sorpresas tiene Ikea preparadas y, sobre todo, qué se romperá durante la retirada.
Iré informando.